Friends,
Last year we made the decision to move from California to Texas, thinking about our future. The cost of living is very high in California and our daughter, who moved to the Houston area last year encouraged us to make the move. We analyzed it and concluded that it was time to do it. It was not an easy decision because it had been a quarter of a century that we shared with the church in California. However, it has been an experience full of challenges that we accept with pleasure.
Upon coming to Texas, in the middle of the year, we determined to continue in the ministry by starting a new congregation. We accept that challenge aware of the effort it requires, but also very aware of the spiritual needs of our people. We will do what is within our reach as God gives us strength.
In August we had our first meeting. We met with another couple and their daughter, who are the result of our ministry in California, but they moved to Houston 16 years ago. That first meeting was joined by another family that also moved from California last year, who also came from being part of our previous ministries. We have met faithfully every Sunday, and we have also made contact with several people and families. To date we have an average attendance of 20 people, among whom four have not yet experienced an encounter with the Lord.
We are working with other families to integrate them into the group and we are looking for a place to rent and congregate, in order to have better attendance. At the moment we meet in a house, but there are people with children who have expressed that when we have our own place, they will meet with us. We had the experience of seeing a lady give her life to the Lord, and we hope to witness many cases like
that. We are teaching the group to give offerings and tithes; and so far we have a little more than two thousand dollars after buying 50 chairs for regular use.
We want to thank with all our heart those who in one way or another are supporting our ministry. We receive good offers from Baptists to work for them, but our heart is Friends from our childhood.
We trust that God supports our effort and gives us results even beyond our expectations. Our goal for 2020 is to close the year with a congregation of no less than fifty people. It is a big challenge, but we will work with that focus.
My wife Delmy, is a key part of the ministry. She is responsible for children’s ministry, which we consider a priority for the integral growth of a new congregation.
Once again, thank you very much, may God bless your
efforts to support the vision of a new flock that is being formed for the glory of God. God is using David Byrne, who is a person for whom we thank God for having a heart for Hispanics.
God bless the ministry of the Friends Church and as a single team let us build up the Kingdom of God on earth.
Sincerely,
Arnoldo and Delmy García
El año pasado tomamos la decisión de movernos de California a Texas, pensando en nuestro futuro. El estatus de vida es muy costoso en California y nuestra hija, que se movió al área de Houston el año pasado nos motivó a hacer este cambio. Lo analizamos y llegamos a la conclusión que era el momento de hacerlo. No fue una decisión fácil porque fue un cuarto de siglo el que compartimos con la iglesia en California. Sin embargo, ha sido una experiencia llena de retos que aceptamos con gusto.
Al venir a Texas, a mediados del año, determinamos continuar en el ministerio iniciando una nueva congregación. Nosotros Aceptamos ese reto conscientes del esfuerzo que requiere, pero también muy conscientes de la necesidad espiritual de nuestra gente. Haremos lo que esté a nuestro alcance mientras Dios nos de fuerzas.
En agosto tuvimos nuestra primera reunión. Lo hicimos con otra pareja y su hija, quienes son fruto de nuestro ministerio en California, pero se movieron a Houston hace 16 años. A esa primera reunión se une otra familia que se movió también de California el año pasado, quienes también venían de ser parte de nuestro ministerios anterior. Nos hemos reunido fielmente cada domingo, y además hemos hecho contacto con varias personas y familias. A esta fecha tenemos una asistencia promedio de 20 personas, entre las cuales cuatro aun no han experimentado un encuentro con el Señor. Estamos trabajando otras familias para integrarlas al grupo y estamos buscando un lugar para rentar y congregarnos, con el fin de tener una mejor asistencia. Por el momento nos reunimos en una casa, pero hay personas con niños que han expresado que cuando tengamos el lugar exclusivo se reunirán con nosotros. Tuvimos la experiencia de ver a una señora entregando su vida al Señor, y esperamos ser testigos de muchos casos como ese. Estamos enseñando al grupo a ofrendar y diezmar; y hasta el momento tenemos un poco mas de dos mil dólares después de comprar 50 sillas para el uso regular.
Queremos agradecer con todo nuestro corazón a quienes de una manera u otra están apoyando nuestro ministerio. Recibimos buenas ofertas de los Bautistas para que trabajáramos para ellos, pero nuestro corazón es Amigos desde nuestra niñez. Confiamos en que Dios respalde nuestro esfuerzo y nos de resultados aun mas allá de nuestras expectativas. Nuestra meta para el 2020 es cerrar el año con una congregación no menos de cincuenta personas. Es un reto grande, pero trabajaremos con ese enfoque.
Mi esposa Delmy, es una pieza clave para el ministerio. Ella se encarga del ministerio infantil, mismo que consideramos una prioridad para el crecimiento integral de una nueva congregación.
Una vez más, muchas gracias, que Dios bendiga el esfuerzo que hacen por apoyar la visión de un nuevo rebaño que se va formando para la gloria de Dios. Dios está usando a David Birne, quien es una persona por quien agradecemos a Dios por tener un corazón para los hispanos.
Dios bendiga al ministerio de la Iglesia Amigos y en un solo equipo edifiquemos el Reino de Dios en la tierra.
Atentamente,
Arnoldo y Delmy García
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